
Entre buena gente
Aprendió a llorar tarde. Cuando llegó a Santa Arducia y el viento lo traicionó. No se había imaginado que podían formarse tales aires. Tantas […]
Aprendió a llorar tarde. Cuando llegó a Santa Arducia y el viento lo traicionó. No se había imaginado que podían formarse tales aires. Tantas […]
1. Como una huella agrietada. El pintalabios en el cuello. Rastro de una intimidad que no era suya. Se lo vio a mitad de […]
A tu espalda, el consorcio de iniquidades y contingencias empujando la trama absurda y evidente de circunstancias – como el polvo persistente que se […]
Pasó a deshora. Como siempre. Que es como decir que incurrió en su puntualidad habitual. Sonido de fricciones, esfuerzos, lamentos de vapor o vaya […]
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